Todos los empresarios necesitan administrar sus riesgos y seleccionar un seguro es una de las formas más eficientes y sencillas de hacerlo.
Encontrar la póliza adecuada es una parte fundamental de cualquier plan de negocios, pero el proceso puede resultar desgastante, especialmente para aquellos que nunca han adquirido una póliza y conocen poco sobre el tema.
Estas 9 recomendaciones pueden ayudarte a comprender las diferentes opciones de cobertura y a encontrar la protección que necesitas a un precio acorde a tu presupuesto. Te permitirá cubrir en su caso, con los requisitos legales, minimizar riesgos y ahorrarte dolores de cabeza y de dinero.
1.- Conoce los diferentes tipos de seguros empresariales
Tus necesidades variarán en función de algunos factores, incluyendo tu actividad empresarial, tus activos y tu volumen de operaciones.
A continuación te mencionamos algunas de las pólizas más comunes que puedes contratar y lo que cubre cada una de ellas.
·Seguro de Responsabilidad Civil: Cubre las demandas que reciba tu empresa como consecuencia de daños a terceros en sus bienes o en su propia persona.
·Seguro Múltiple Empresarial: Combina la Cobertura de Responsabilidad Civil con otro paquete de coberturas que cubre los bienes de tu empresa contra diferentes riesgos.
·Seguro contra Interrupción de Operaciones: Puede ser considerado también dentro del Seguro Múltiple Empresarial y cubre los gastos de operación en los que incurriría tu negocio, si se viera forzado a ser cerrado temporalmente debido a un incendio, una inundación o algún otro evento de este tipo.
·Seguro de Responsabilidad Civil Profesional: Es popular en los negocios que proporcionan servicios profesionales, es también conocido como Seguro por Errores u omisiones. Los Despachos Contables, de Arquitectura, de Ingeniería, de Abogados, son buenos ejemplos.
2.- Considera qué pólizas te pueden ser requeridas
Adquirir un seguro no solamente es una buena inversión en tu empresa, es una necesidad.
En función de tu actividad, de tu ubicación, de tus clientes, de tus acreedores, puede que tengas la obligación o el requisito de contar con una póliza. Algunos ejemplos pueden ser:
- Cuando rentas una nave industrial o un local comercial, lo más probable es que el propietario del inmueble te requiera contar con una póliza de Responsabilidad Civil como Arrendatario.
- En función de tu ubicación, Protección Civil Municipal te podría requerir una póliza de Responsabilidad Civil para prevenir potencial daño a terceros.
- Si tu empresa cuenta con un crédito, tu acreedor podrá solicitarte una póliza de seguro que proteja tus bienes empresariales así como el inmueble que dejes en garantía.
- Algunos clientes también podrán solicitarte contar con ciertas coberturas, ya sea para el caso de que realices actividades dentro de sus empresas o para cubrir daños potenciales a terceros por el tipo de producto que fabricas o comercializas.
- Algunas Normas Oficiales Mexicanas consideran la obligación de contar con pólizas, como pueden ser Hoteles o Laboratorios.
- En el sector de la construcción es común la adquisición de pólizas para daños a terceros.
- Existen también contratos en donde se requieren niveles mínimos de cobertura, para dar a sus clientes la tranquilidad de que estarán cubiertos sus proveedores ante cualquier eventualidad.
En general, la recomendación es investigar si existen obligaciones legales para tu municipio y/o tu actividad empresarial para que contrates las coberturas adecuadas. Un agente de seguros con experiencia te puede brindar el consejo sobre las coberturas que necesitas.
3.- Conoce los riesgos de tu actividad empresarial
Cada negocio es diferente, y también así lo son los riesgos de tu negocio. Por ejemplo, un contador necesita considerar una potencial demanda por un error en una declaración fiscal. El dueño de un Restaurante, por otra parte, necesita estar más preocupado porque algún cliente resulte enfermo por ingerir alimentos en mal estado.
El Seguro de Responsabilidad Civil Profesional puede proteger a profesionistas como los contadores por demandas relacionadas con errores al ejercer su actividad, mientras que un seguro de responsabilidad civil productos puede pagar a un restaurante los gastos legales y los daños a sus clientes en el caso de que sufran una enfermedad como consecuencia de los alimentos que les hayan sido servidos.
Evaluar cuidadosamente los riesgos a los que está expuesta tu empresa, te permitirá adquirir el seguro que necesitas para protegerte adecuadamente contra ellos.
4.- Prioriza coberturas sobre el costo de tu seguro
Una vez que como empresario conoces el seguro que necesitas, la siguiente pregunta es por lo general cuánto costará la póliza. Después de todo, cuando el presupuesto está ajustado, es necesario cuidar los centavos. De cualquier forma, es importante reflexionar que aunque a veces se considera el seguro como un gasto adicional, en realidad éste juega un papel crucial para proteger a tu empresa contra algún daño financiero severo.
Puede parecer tentador seleccionar las pólizas más económicas que puedas encontrar para ahorrarte algunos pesos en tus primas, pero en el largo plazo, esto podría salirte mucho más caro. Las pólizas más económicas tienen ese precio por alguna razón. Quizás ofrezcan coberturas limitadas que te dejen más vulnerables ante algunos riesgos, o tal vez los deducibles de la póliza resulten más elevados lo cual también te afectaría en el caso de un siniestro.
Lo recomendable es considerar una aseguradora reconocida y la póliza con las coberturas que necesites y que tu presupuesto te permita. De otra forma, quizás lo barato no te permita cubrir adecuadamente las pérdidas y de esta forma, complicar la continuidad de operaciones de tu empresa.
5.- Considera el monto de tus deducibles
La mayoría de los seguros empresariales consideran un deducible, que es la cantidad que como asegurado te corresponde cubrir antes de que tu póliza participe en la pérdida. Una vez que tu deducible ha sido cubierto, la compañía de seguro te cubrirá el resto del monto reclamado, hasta alcanzar su límite que corresponde a la Suma Asegurada.
A mayor deducible, menores resultarán tus primas, de manera que es probable que te veas tentado a escoger un deducible mayor. Sin embargo, necesitas estar seguro que tu negocio sea capaz de pagar el deducible seleccionado al momento de un siniestro. No olvides este punto al seleccionar tus deducibles.
6.- No subestimes tus necesidades de seguro en materia de Responsabilidad Civil
Una demanda podría ser devastadora para tu negocio. Aún si la demanda es deshechada, el proceso puede resultar muy costoso para tu negocio. Esa es la razón por la cual, siempre que te resulte posible, es mejor considerar sumas aseguradas mayores a la suma asegurada mínima necesaria. Y es que nunca sabes cuando necesitarás de protección extra.
Si un cliente sufre un accidente en tu negocio o si tienes un incendio y afectas a tus vecinos, los gastos pueden crecer rápidamente. Si el monto a pagar supera la Suma Asegurada, la diferencia tendría que salir de tu bolso.
7.- Trabaja con aseguradoras confiables
La mejor forma de garantizar que tus coberturas te respondan adecuadamente es adquiriendo tus seguros de una aseguradora confiable. Si bien en nuestro país, las compañías de seguros son supervisadas por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, nuestra recomendación es considerar una compañía financieramente sólida y que tenga una oferta de calidad, coberturas confiables y pago de siniestros ágiles.
Para considerar lo anterior, es recomendable apoyarte en un bróker de seguros que cuente con experiencia y con conocimiento de los procesos de las aseguradoras, lo cual te brindará mayor certeza sobre su operación. En Certus trabajamos con varias de las principales aseguradoras del país. Puedes rápidamente cotizar con varias de ellas y comparar precios y coberturas.
8.- Lee y conoce el seguro de tu empresa
Las pólizas varían de compañía a compañía, y cada una tiene sus propios límites, deducibles y exclusiones. Antes de comprar tu seguro, debes asegurarte de comprender lo que queda cubierto bajo los términos de tu póliza y también lo que no está cubierto.
Como hombre de empresa, quizás pienses que no cuentes con el tiempo suficiente para involucrarte en los detalles de tu seguro. Pero, tomar el tiempo necesario para leer y comprender tu seguro antes de adquirirlo, te permitirá asegurarte que no cuentes con vacíos o brechas en tus coberturas, y de esta forma evitar que te vayas a llevar una sorpresa desagradable al momento de integrar una reclamación. Si tienes dudas sobre lo que cubre y lo que no cubre tu póliza, nosotros podemos apoyarte.
9.- No dudes en pedir ayuda
Comprar un seguro puede ser un proceso confuso para cualquiera. Si necesitas asesoría sobre los mejores productos en materia de seguros para tu negocio, o simplemente si necesitas una mejor comprensión de los términos de tu seguro y de sus coberturas, asegúrate de consultar esto con un agente de seguros.
En CERTUS estamos especializados en actividades empresariales. Tendrás contacto con un agente con experiencia, que ha ayudado a otras empresas como la tuya, a encontrar las coberturas correctas al mejor precio.
Nuestros agentes pueden también ayudarte a ahorrar dinero a través del diseño de tu póliza, empaquetando coberturas siempre que resulte posible a través de un Seguro Múltiple Empresarial.
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